Homenaje a Mariano Etkin y Luis Piovan
Lugar y fecha: Teatro Municipal, 27 de Agosto del 2016.
Obras:
- Genealogía sobre un TOC (2015) – electroacústica- Alberto Carranza
- Sal (2016)- electroacústica- Mario Mary
- Cósmica (sinfonía modular para guitarra eléctrica y medios electroacústicos). Partes V y II (2014) Leonardo y Leandro Mantiñán
- Octeto para instrumentos de viento (versión de 1952) – Igor Stravinsky
- Septeto, para instrumentos de viento (1948)- Paul Hindemith
- Octandre (1923) – Edgard Varèse
Intérpretes:
Leonardo Mantiñán (guitarra eléctrica), Gabriel Braña (flauta), Andrés Vigil (oboe), María de la Cruz Rodriguez y Aña Miñones (clarinetes) Micaela Scaramuzzino y Francisco Di Meo (fagots) Christian Fabris (corno) Claudio González y Oleg Shkoyar (trompetas) Luis Arroyo y Jean Pierre Hauman (trombones) Gustavo Auday (contrabajo)
El aquí y ahora resuenan en nuestra ciudad en esta sexta edición de Bahía Actual. La materialización de la idea en sonido, la incorporación de diversos materiales sonoros y el empleo particularísimo que de ellos realiza el compositor, crea una pluralidad de voces que este festival ha podido expandir con éxito.
La presentación de tres obras cuyo eje es el espacio, han conformado la primera parte del programa. En Genealogía sobre un Toc, la delicada utilización espacial de diversos elementos sonoros referenciales y acusmáticos, su alternancia y reiteración remiten a un espacio narrado: el interior de una casa. Aquí, sonidos concretos (el agua, la apertura – cierre de una puerta, entre otros) devienen en objetos sonoros que, en este contexto, se deslindan de una lectura causal.
En Sal, Mario Mary aborda lo que él llama polifonía del espacio: “La espacialización, en música electroacústica permite establecer altos niveles de complejidad polifónica de manera controlada”. El arduo trabajo de modelación de sonidos sintéticos y de su recorrido espacial en sistema cuadrafónico genera un resultado sumamente particular: alejamiento-acercamiento de sonidos rugosos, brillantes y percepción de superficialidad-profundidad. Este último aspecto es explotado en Cósmica, ya que aquí, el espacio se plantea como infinito: un fondo sobre figuras que, por momentos, se funden en el todo y, por otros, dibujan claras referencias melódicas al rock de los 70. Tal como sus compositores bien supieron poner en palabras, su título refleja la atmósfera de inmensidad y oscuridad propias del espacio sideral.
La segunda parte del concierto, dio lugar a tres complejísimas obras de tres compositores destacados del siglo XX: Stravinsky, Hindemith y Varèse.
El Octeto para instrumentos de viento de Stravinsky constituye una de sus primeras composiciones de su etapa neoclásica, que se transluce en el resurgimiento de las formas absolutas. Los tres movimientos: sonata, variaciones y fuga como partes de un todo; el pandiatonismo y la textura lineal, reflejan las características de esta estética. La impecable interpretación, da cuenta de la pulcritud con la que ha sido abordada tanto por músicos como por el director.
El contrapunto disonante constituye uno de los elementos principales de la obra de Hindemith. En su Septeto para instrumentos de viento, el trabajo armónico libre sobre un eje central y la adhesión a las formas barrocas y clásicas adquieren aquí un tinte innovador: un pasado rescatado y metamorfoseado por un tratamiento original de los aspectos horizontales y verticales de su música. Nuevamente, la labor arquitectónica de construcción de la dirección e interpretación, dio por resultado una ejecución exquisita.
El cierre del concierto estuvo precedido por una dedicatoria especial a Luis Piován y Mariano Etkin, quien sugirió la realización de Octandre, de Edgard Varèse, una composición en la que la textura de nube sonora es la consecuencia de la experimentación con sonido y ritmo: grupos de notas, que son las bases para la construcción de la célula musical; líneas melódicas en las que el timbre es el componente fundamental; el ritmo, como elemento generador de forma; la armonía, no percibida en sentido vertical, sino más bien en el color e intensidad de cada nota y su indistinción dentro de la masa sonora.
Seis obras. Seis formas de creación artística que confluyen en una actualidad que se resignifica y se reinstala con cada oportunidad de escucha. En este sentido, BACIC, pretende ser un espacio grupal de encuentro y promoción del arte y artista de hoy.
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