Sobre el encuentro Bahía Actual 2015.

 

Lugar y fecha: Centro Histórico  Cultural de la UNS/ Teatro Municipal, días 22 y 23 de Agosto del 2015

 

Obras estrenadas:

  • Leve ausencia (Alberto Carranza)
  • Pasos, intermitencia (hacia oscuros lugares) (Luis Ormeño)
  • De Ánima (Leandro Mariñán)
  • Maknongan, para un instrumento grave (Giacinto Scelsi)
  • IRT-BMT (Mariano Etkin)
  • La pregunta sin respuesta (Charles Ives)
  • Somos viento (Luis Rojas)
  • Pierrot Lunaire (Albert Schönberg sobre poemas de Albert Giraud) ,

“Siglos de siglos y sólo en el presente ocurren los hechos; innumerables hombres en el aire, en la tierra y el mar, y todo lo que realmente me pasa, me pasa a mí”

                                                                           Borges, Jorge Luis  El jardín de los senderos que se bifurcan

 

Toda obra sonora, en tanto juego complementario, está conformado por la simetría  entre   inmaterialidad  y  materialización, ya que, a través de un proceso artístico de creación, el compositor construye un microuniverso   que entrega al oyente, quien  ofrece una experiencia empírica  irrepetible.  No se trata aquí de la idea de un demiurgo que dispone a capricho un cosmos ordenado que debe ser decodificado,  sino  que, desde  un acto de libertad, traza redes de configuraciones posibles que se presentan inagotables. La mirada- la propia mirada- constituye un punto del continuum infinito de horizontes de percepción.

Cada ciclo  de Bahía actual, propone un encuentro lúdico entre el compositor –quien, como artesano, selecciona, recorta y  manipula material sonoro- Y el oyente, – quien re-crea la obra desde su audición.

En las  extraordinarias conferencias dictadas por el compositor y docente Mariano Etkin, fueron planteadas las problemáticas principales de la música: el tiempo, su continuidad/ discontinuidad,  la musicalidad, la forma, el timbre y su visualización sobre obras del propio Etkin, Ives  y Schönberg.

Según la idea Adorniana, en la música contemporánea, se  parte de los elementos particulares para la configuración del todo.  Más allá de las diferencias de estilos, todas las obras presentadas poseen como elemento común la búsqueda exhaustiva de reinvención y la intención de comunicación. Constituyen un presente, ya que  existen en tanto transcurren, de modo que son infinitas, siempre abiertas a reacciones y comprensiones nuevas: “Lo que importa es lo que quiero transmitir, más allá de la forma” afirma Luis Rojas respecto de su producción. “Lo importante es la pasión que se pone en lo que se hace” enuncia  Mariano Etkin.

“me interesa explorar” expresa Leandro Martiñán.   Estos aspectos se vieron absolutamente marcados en cada una de las admirables composiciones que se pudieron escuchar en ambos conciertos: la Melancolía – en Leve ausencia-,  la búsqueda – en Pasos, intermitencia (hacia oscuros lugares)- , la  exploración de recursos sonoros instrumentales  y tímbricos   –  en De Ánima,  IRT- BMT ,Pierrot Lunaire y Maknongan-, trascendencia – en La pregunta sin respuesta– , la liberación –  en Somos viento-.

A diferencia de otras artes, la música, requiere de un intérprete. Es el confluencia entre compositor, obra y perceptor. Cabe destacar  que  la extraordinaria ejecución de la totalidad del programa mencionado  demuestran  un arduo trabajo de estudio, dedicación y ensamble.

La experiencia que plantea Bahía actual constituye, entonces,  una forma más  de redescubrirnos a través del arte: “ Cada cual se mira en los otros (…) Todos están en todas partes y todo es todo .Cada cosa es todas las cosas”, expresaba Plotino.  Desde el rol que se elija (el de creador, ejecutante  u oyente), cada obra es una invitación al encuentro con  un otro y a una  búsqueda infinita que se renueva, como espejo del tiempo, en cada nueva- e íntima-  invitación a la escucha.

María Sol Causse